martes, 23 de agosto de 2011

Nuestro peor Enemigo..

Da igual con quién hablemos, con quién nos expresemos o con quién salgamos, si nosotros mismos nos sentimos encerrados en nuestro interior. Esto es tan verdad como que el Sol sale cada día y que cada día hemos de cumplir con unas obligaciones.

Porque cuando piensas en ESO constantemente no disfrutaremos de lo que tienes aquí. Las personas por mucho que creamos que podemos hacer varias cosas a la vez, la verdad es que si no te entregas con cuerpo y alma en hacer lo que tienes que hacer, aquello con lo que estás no lo hagas, pues para dejarlo a medias, mejor no empezarlo. Y esto lo podemos poner desde una relación de amistad, una tarea en tus estudios, o recoger y limpiar el cuarto… La lista es infinita.

Y cuando no sabemos que nosotros somos nuestro peor maestro, nuestro peor enemigo, estamos condenados a fracasar en muchos aspectos de la vida, pues queramos o no admitirlo, el ser humano es un ser Social ya sea por necesitar que alguien haga o termine algo por ti, o simplemente para sentirnos bien, el ser humano solitario, completamente se terminará haciendo un Wilson que sólo valdrá para que no explote tu cabeza. Yo, por eso escribo. Es mi medicina y compartirlo es mi forma de sociabilizarme y que poco a poco nos conozcamos un poco más.

Mi peor enemigo anida en mi interior y me niega que progrese me maltrata y me pide alcohol para olvidar mi vida, y no hay polvo que me satisfaga cuando no salgo de mi cabeza.

Sale el Sol como cada día
y yo me encierro más en mí;
no quiero saber de penas ni alegrías,
tan solo protegerme de ti…

A veces intento salir de aquí,
pero me asusta saber que he perdido,
por exiliarme sin haber vivido
todo aquello que pude y no vi…

Quizás me escucho demasiado,
o nada…
Quizás me impongo demasiado,
pero no quiera aprender nada…
Quizás me esté destruyendo
o quizás solo me estoy protegiendo
de un mundo que no me ofrece nada…

Pero he de reconocer que os necesito
y que aislado en mi soledad
a veces desvarío y grito
y me pierdo en mi propia necedad…

lunes, 8 de agosto de 2011

Dualidad

Queridos lectores... De parte de Las 3Esencias quería disculparme por el retraso de esta entrada... Pero debido al periodo estival en el que nos encontramos, creímos que estaría bien tomarnos una semanita de relax para traeros nuevos temas, actualizaciones más frescas... así que nada más que deciros... solo que lo disfrutéis como siempre :D
Miro a mi alrededor y no sé qué
caras distinguir en los demás cuando veo que todos somos dos caras, somos el sol y la luna en las mismas ocasiones cuando las diferentes pasiones nos atizan. Somos el calor y el frio más férreo cuando pensamos. La fría indiferencia o el afectuoso abrazo cuando os vemos… ¿Qué cara me mira?
Y saber que todos somos al menos dos caras, la femenina y la masculina, el ser y el no ser, yo y el súper yo, saberlo no me hace superior a ninguno de vosotros, saberlo me pierde y me agobia no poder descifraros.
Duele saber que la empatía se pierde, duele perderte en tus dos caras, duele no encontrar el camino, duele que te separen de tu parte femenina o de la masculina, todo duele, perder los pantalones o ponerte la falda, es igual, cuando no estás en tu propio Yin Yang, estás más desequilibrado que herido, pero ese equilibrio no se recupera sólo con amor o con el tiempo…
Ser el tiempo que nos queda o el que fuimos es tan importante como el ser o el estar, tan confuso como el aire o el viento, la lluvia o el agua, si fue primero el huevo o la gallina…
La herida que se crea cuando te rompes, cuando no sabes quién eres, cuando sabes que has perdido tu mitad, cuando has perdido tu calor, o tu frio, e intentas inútilmente arreglarlo con imperdibles consejos , o inútiles que aparecen en tu vida, o ya estaban y aprovechan tus heridas…
Incomprensible como todo esto son las heridas del Yin del Yang que todos tenemos, de la oscuridad que nos asusta, y de la luz que añoramos temer. No saber si vemos el punto blanco en la hoja negra, o la negra en el punto blanco. Da igual los colores, los matices si no te conoces, si te pierdes, o si conoces el sabor de la amargura o de la felicidad auto provocada y perdiste el balance…
Yo me perdí. Yo estoy perdido. Tanto que ni entendí lo que escribí.
¿Pero quién se entiende?



Me convierto en cara o cruz
sin controlar mi dualidad
para guiarte hacia la luz
o perderte en mi oscuridad

Soy tu ángel o demonio
yo represento al binomio
que hace que sonrías
o que te ahogues en lágrimas frías

Soy la paz y el agobio
Soy la lucha eterna
entre el amor y el odio
lidiado en mi mente enferma…

¿Qué está bien o mal?
¿soy la Tierra o el Mar?
¿presente o eternidad?
¿la voluntad o miedo a volar?

Y es que ya no puedo más!
mis dos caras se quieren separar
desgarrando mi alma con violencia
dejándome ausente en tu presencia…
Mi corazón se quiere inmolar…

Gritos y alaridos
que solo yo escucho
dolores a mi alma adheridos
cuando contra mí mismo lucho

se acerca mi final, lo intuyo
el frio en mis huesos
temo los próximos sucesos
salgo corriendo, huyo…

La muerte no será la respuesta
pero en ella está la calma
de esta vida molesta
porque a mi ya nadie me salva…